PREVENIR EL ALZHEIMER
El alzhéimer es una enfermedad neurodegenerativa que se manifiesta como deterioro cognitivo y trastornos conductuales. Se caracteriza en su forma típica por una pérdida progresiva de la memoria y de otras capacidades mentales, a medida que las células nerviosas mueren y diferentes zonas del cerebro se atrofian. La enfermedad suele tener una duración media aproximada después del diagnóstico de 10 años, aunque esto puede variar en proporción directa con la severidad de la enfermedad al momento del diagnóstico. Es la forma más común de demencia, es incurable y terminal, que aparece con mayor frecuencia en personas mayores de 65 años de edad.
El síntoma inicial es la inhabilidad de adquirir nuevas memorias, pero se puede confundir con actitudes relacionadas con la vejez o al estrés. El diagnóstico se realiza con evaluaciones de conducta y cognitivas, así como neuroimágenes. A medida que progresa la enfermedad, aparecen confusión mental, irritabilidad y agresión, cambios del humor, trastornos del lenguaje, pérdida de la memoria de largo plazo y una predisposición a aislarse a medida que los sentidos del paciente declinan Gradualmente se pierden las funciones biológicas que finalmente conllevan a la muerte.
El equipo de William Jagust (del Instituto Helen Wills de Neurociencia, dependiente de la Universidad de California en Berkeley) y Susan Landau (del Laboratorio Nacional estadounidense Lawrence Berkeley) ha confirmado que existe una asociación significativa entre niveles altos de actividad cognitiva a lo largo de la vida y niveles bajos de beta-amiloide.
En la investigación también han trabajado especialistas del Centro de la Memoria y el Envejecimiento y del Centro para la Enfermedad de Alzheimer
La actividad cognitiva es un proceso múltiple e interactivo que involucra armónicamente a todas las funciones mentales, a saber: percepción, memoria, pensamiento, lenguaje, creatividad, imaginación, intuición, interés, atención, motivación, conciencia e incluso creencias, valores, emociones, etc.
Para prevenir el alzhéimer un estudio indica que realizar de manera habitual actividades intelectuales a lo largo de la vida, desde por ejemplo leer libros, hasta resolver crucigramas, puede servir para prevenir la enfermedad de Alzheimer, o al menos retrasar la aparición de sus efectos nocivos sobre la capacidad mental. Esto sugiere que las terapias cognitivas pueden ser más eficaces si se aplican lo bastante temprano, antes de que los síntomas aparezcan, podría ser más fácil prevenir que curar La acumulación en el cerebro, formando placas, de una proteína denominada beta-amiloide, parece ser el mecanismo en el desarrollo de la enfermedad de Alzheimer. Estas acumulaciones resultan nocivas para las células del cerebro, al impedirles funcionar de modo apropiado.
Aunque las acumulaciones de esta proteína en el cerebro pueden deberse en parte a factores genéticos y al envejecimiento, la cantidad de actividad intelectual que ejerza una persona durante su vida es algo que depende de su voluntad, por lo que aquí hay una vía que todos podemos seguir para prevenir la enfermedad de Alzheimer o al menos retrasar la aparición de sus efectos nocivos sobre la capacidad mental.
Opinión:
Sabiendo que con esforzándonos un poco más a lo largo de nuestra vida en nuestras actividades intelectuales, como resolver crucigramas podemos prevenir que cuando seamos mayores podemos líbranos de esta enfermedad que no tiene a día de hoy cura, creo que es bastante fácil poder prevenir sin demasiado esfuerzo.
Enlaces:
http://www.uvs.sld.cu/glosario/ploneglossary.2006-08-08.4973748209/ploneglossarydefinition.2007-03-08.9987713907
http://es.wikipedia.org/wiki/Enfermedad_de_Alzheimer
http://noticiasdelaciencia.com/not/3382/prevenir_el_mal_de_alzheimer_mediante_una_intensa_actividad_intelectual_a_lo_largo_de_la_vida/
No hay comentarios:
Publicar un comentario